2 de abril de 2008

Calor de Verano...



Hoy es una de esas noches, dónde se humedece las sabanas
En una noche calurosa de verano intenso, tu mirada me despierta
Solo la luna penetra nuestra intimidad sin aquiescencia
Me hundo en tu piel, olfateándote con mi lengua cual serpiente
Voy escalando entre cada repliegue esquivando o enfrentando sortilegios,
dureza que cual caballete afrento en mi boca.
Perdiendo los sentidos, deleitándome, descubriendo la musa de los sueños
Entre el agridulce sabor que infringe mi gusto dulce de nata.
Dejándome llevar por las brasas de la piel confundiéndolas con el soplo caliente del viento.
Los surcos de tu cuerpo me hacen distanciarme del deseo de ser complacida
Disfruto tus jadeos, y el estremecer de tu cuerpo,
como remolino succiono hacia mis entrañas tu velero
que ondea en el mar de mi piel impregnada de bruma en forma de sudor.
Entre cada estremecer el cuerpo se constriñe, contrayendo cada musculo
estrechando mis entrañas, palpitando frenéticamente, adentro más aún tu velero
A la gruta que osaste penetrar.
Pieles sudorosas soldadas, confundidas por un instante reposan en los brazos amados.