1 de julio de 2015

He tanto hablar solo queda el silencio.

De tanto hablar poco digo, porque lo que realmente deseo decir, quedo silenciado en el tiempo.
Son murmullos que no deseas escuchar, son sentimientos que nada te dicen ya, de que vale la pena preguntar si tu alma palpita nuevamente, o si te arrancan los deseos,  si tan solo no puedes estremecerse a mi lado.
De que me sirve estar en el ojo de las tormentas, si apenas veo que ellas remueven y renuevan otras sendas.
De tanto hablar poco digo, porque lo que quisiera gritar se hizo silencio una tarde de domingo.

Son frases balbuceadas que jamás volveré a pronunciar, son palabras dejadas que ya no dicen nada. Como nada dice la mirada cada vez que te sueño.