9 de abril de 2008

Horizontes...



Aire que surcas el mar
Moviendo su cuerpo, forjando oleajes
intentando abrazar a su amante gris
Revolcando su furia en ella desarmado
en la magia del amor que a ambos abraza
minimizando el furor de un oleaje encrespado
suavizando el torbellino,
para hacerle sucumbir en un manto
de espuma blanca en la orilla
En un cálido remanso de paz.
Bramido que se eleva como gemidos
Estallando en forma de bruman en el arrecife
de arcadas abiertas tomo la fuerza del mar para
elevarme en esencia a la luz en ese lugar donde apremia
El tiempo detenido, anclado al ancho horizonte
tornándose epicentro mismo en abrazar con galas
El alba y el ocaso, en una misma línea
Donde el misterio abraza el cielo y el mar