10 de abril de 2008

Un dulce poema...

Recados e Imagens - Arte - Orkut

A la mujer que cautivo mi mirada, llenando mi corazón de pálpitos
la que puso estrellas en mis ojos, y me alargo los días en la espera
acortándolos mientras disfrutaba de su presencia.
A ti que de velo blanco y engalanada, me prometiste un si, hasta la eternidad.
Haciéndome complemento de tu esencia noble, del palpitar de tu alma.
Fuiste siempre el apoyo, a expensas de tus propios titubeos.
Fuiste la guerrera que me dio la mano ante cada caída
Fuiste la risa clara en mis días de tristeza, arrancándome alegrías.
Te diste cual tierra fértil, germinándome la vida y las ganas de vivir
Por alguien, a quien dejar mis sueños, en dónde perpetuar mi raíz.
Eres la mujer que se olvida de decir su nombre en los versos del poeta.
Mas siempre estas presente cada vez que te recito el más dulce de los versos.
No estés triste esposa Amada, nadie recita a la novia,
Sólo se rememora el sentimiento con el que te arropo cada noche
Como el que te cubro sobre el hombro ante un atardecer.
El sentir que nos une las manos, y nos hace mirar un horizonte común.
Eres quien en generosa entrega,
abrió sus entrañas para además de sentirme hombre amado
Sentir el abrazo de quien lleno de gozo me llamará papá
A ti mi amada esposa dedico este poema.
No te prometo la luna, ni bajarte las estrellas, tan sólo un corazón abierto.
Unos brazos que te aguardan, una vida plena a dos.


Alguien quiso unos versos a su Esposa dedicar, y en su búsqueda mi buen amigo Vagoh, poco o nada hallo, aunque para mi ellos estén incluidos en los versos que se escriben al Amor, así que dejaré uno para quien lo quiera a su esposa dedicar.